Juan Mauro
Juan Mauro, a sus 42 años, comparte su trayectoria y cómo se convirtió en un preparador físico apasionado. A pesar de que su carrera principal fue en el ámbito comercial, siempre estuvo vinculado al deporte. Desde los siete años, ha sido un deportista dedicado, principalmente al fútbol.
Recuerda cómo, en su juventud como futbolista, a pesar de que los profesionales le proporcionaban rutinas de entrenamiento, a menudo carecían de una base teórica sólida, algo que encontró vital más tarde en su vida. Esta fue precisamente una de las razones por las que decidió inscribirse en un curso de preparación física: tenía experiencia práctica, pero carecía del conocimiento teórico.
Al retirarse del fútbol el año anterior, Juan Mauro decidió continuar su relación con el deporte a través de la preparación física. Esta decisión lo llevó a capacitar y equiparse constantemente. Lo que empezó como un esfuerzo individual, utilizando materiales prestados y su propio conocimiento adquirido, se transformó en un negocio rentable.
Hoy en día, está generando un ingreso satisfactorio, permitiéndole invertir en equipamiento propio como pesas rusas, bandas elásticas, colchonetas, entre otros. Este progreso económico, dice Juan Mauro, justifica el valor del curso, que estima debería valer al menos $200.
Su mensaje principal es alentar a otros a seguir sus pasiones. Aconseja invertir en educación y capacitación, ya que es una inversión que se recupera rápidamente. Juan Mauro enfatiza que no hay que temer invertir en uno mismo, y que con dedicación y esfuerzo, como él demostró al pasar de pedir materiales prestados a tener su propio equipo, es posible lograr el éxito.
En resumen, Juan Mauro nos invita a perseguir nuestras pasiones, invertir en nuestra educación y no temer los desafíos. Su historia es un testimonio del poder de la dedicación y el esfuerzo sostenido.